martes, 7 de junio de 2011
BENEFICIOS DEL ACEITE DE OLIVA
El aceite de oliva es un pilar esencial para una alimentación equilibrada tanto por sus propiedades curativas como por su versatilidad en la cocina, da personalidad a cualquier plato: ensaladas, salsas, vinagretas, frituras y guisos.
Su principal componente, el ácido oleico, posee un beneficioso efecto sobre el corazón: reduce los niveles en sangre de colesterol malo o LDL, actuando como preventivo frente al infarto e incrementa los del bueno o HDL, reduciendo el riesgo de aterosclerosis.
Su abundante contenido en vitamina E (siempre que sea virgen extra, obtenido de la primera presión en frío) lo convierte en un aliado para luchar contra el daño de los radicales libres y el envejecimiento.
Comparado con otros aceites vegetales como el de girasol u otras semillas, es más apto para ser calentado a temperaturas de hasta 180-200ºC (fritura) gracias a su estabilidad.
Se aconseja un consumo diario de una o dos cucharadas en crudo (una la podemos sustituir por semillas trituradas o molidas de girasol, calabaza, lino o sésamo).